Las vacaciones de verano ya están muy lejos, así que ahora estamos como locos buscando ideas para salir de la ciudad y desconectar unos días. Y en otoño – invierno, parece que nos apetece ir a la montaña. Ahora podemos disfrutar de los colores de los árboles y, un poco más adelante, de las primeras nieves. Viajar está muy bien, pero no hay nada como ir a tu segunda residencia, donde tienes todo lo que necesitas. Aquí es importante decorar esta casa como un verdadero hogar donde tengas todas las facilidades y comodidades para sentirte a gusto.
Fuente: El Mueble
Normalmente, cuando pensamos en casas de montaña o en el pueblo, pensamos en decoraciones en madera, fibras y forjas; con predominancia de colores marrones y verdes. Estas viviendas tienen que trasmitir calma y paz. Pero mucha gente lo rechaza en seguida porque cree que es anticuado o pasado de moda; nada más lejos de la realidad, el estilo rústico puede ser todo lo moderno y sofisticado que tú quieras.
Preparando la casa
Lo primero es que prepares la casa para que sea cómoda y habitable. Si tu intención es aprovecharla en invierno, no debe faltar una fuente de calor. Puedes elegir entre calefacción central, radiadores, chimeneas de bioetanol o aparatos inverter de aire acondicionado.
Los techos suelen dejar las vigas vistas en madera para darle ese toque de carácter. Pero no siempre es así. En este caso puedes marcar más el estilo rústico con techos y paredes forrados en madera. Ten en cuenta que esto hace las habitaciones más oscuras y las recarga mucho, por lo que nosotros te recomendamos que pintes en un color claro o, incluso blanco y que le des el toque rústico por otras vías. En caso de elegir blanco tendrás que darle el toque de calidez en el suelo porque si no se intensifica las sensación de frío.
Otra opción es revestir la pared con un zócalo hasta media altura. Da un toque muy rústico. También puedes revestir toda una pared en piedra dejando el resto al aire, sobre todo si tienes chimeneas empotradas.
Respecto al suelo, normalmente se usan suelos cerámicos como baldosas de barro cocido o gres que puede imitar desde la madera a la piedra natural. Y un acabado de gres porcelánica que imite a las antiguas baldosas hidráulicas es lo último. Si prefieres madera, opta por los laminados.
Por último, sácale el máximo partido a las vistas. Despeja las ventanas y opta por cristales transparentes y con aislamiento térmico. Esto reducirá mucho tus facturas. Olvídate de las cortinas y opta por estores de madera.
La decoración
Un estilo rústico no implica que todo tenga que ser de madera, fibras o forja. Sino que puedes decorar con muebles normales, modernos e innovadores y dejar esos toques rústicos para determinados complementos y muebles. Aquí tienes unos trucos para las diferentes habitaciones:
– Salón: Hazte con el sofá que más te guste, preferiblemente en un color claro de la gama beige-arenas-grises y da un toque de color con los cojines. Puedes escoger alguno con una decoración de flores muy propia para el lugar. Coloca al lado del sofá una cesta de mimbre con varias mantitas enrolladas con las que te puedas tapar mientras lees o ves la tele. Y no olvides una alfombra mullida que encuadre la zona de sofá y mesa de centro. En invierno es imprescindible. En verano la puedes retirar y quedará mucho más ligero.
Esta habitación es ideal para instalar una chimenea. Si no está preparada para las tradicionales, compra una de bioetanol, mucho más cómoda y segura y ubícala aquí. Puedes dar un toque simpático si colocas un cesto con leños al lado, aun sin necesitarlos para que funcione.
– Comedor: Aquí te recomendamos que optes por una mesa de madera. Si te gusta lo tradicional (madera y hierro) puedes hacerte con modelos como Cross de Sovet Italia o Skorpio de Cattelan Italia. Si la quieres entera de madera, nos encanta Bora Bora de Cattelan.
– Dormitorios: Si tienes hijos y comparten cuarto, opta por soluciones de camas nido o literas que ahorran mucho espacio, así también tendrán espacio para jugar. Puedes verlos en nuestra sección de dormitorios juveniles. Además, suelen incluir una zona de escritorio que es ideal para cuando tengan que hacer deberes. Para estudiar bien tienes que contar con un espacio cómodo y adecuado, así que no puede faltarles.
– Baño: Se lleva la ligereza de los lavabos al aire, aquí, un espejo con marco de madera y unos coquetos apliques a los lados da un toque muy hogareño. Puedes decorar con una estantería metálica donde dejar las toallas, jabones, colonias. Pero recuerda que al estar a la vista tiene que estar ordenado y limpio.
– Zonas de exterior: Normalmente en casas de montaña contamos con terrazas y jardines. No los desaproveches y vívelos también en invierno. Eso sí, con algún cambio. Puedes colocar una pequeña mesita auxiliar, estilo velador con un par de sillas donde sentarte a tomar un café después de comer con el sol dándote en la cara. Llévate tu mantita para abrigarte y disfruta de este momento de desconexión.
Ahora anochece muy pronto, así que alguna lámpara de jardín te vendrá genial porque disfrutarás mucho más de tu casa, y podrás ver el jardín de noche. Si quieres mimetizarlas más con el ambiente elige las macetas con luz, si no, las lámparas Kubo de Vondom o Fluo de Slide son perfectas. Aunque si vas a pasar aquí las Navidades, no puedes perderte Chrismy.
¿Te apetece volver al pueblo? ¡Aprovecha los fines de semana, puentes y vacaciones de esta época y sal de la rutina diaria!